La principal hipótesis de los investigadores, basada en los resultados preliminares de las autopsias, señala que Bernardo Seltzer fue la primera víctima del trágico episodio ocurrido en un departamento de cuatro ambientes ubicado en Aguirre y Julián Álvarez, en el barrio porteño de Villa Crespo. El miércoles por la tarde, fue hallado sin vida junto a sus dos hijos, de 12 y 15 años de edad, y su esposa, Laura Leguizamón, quien habría cometido los asesinatos antes de suicidarse.
Según el informe recibido por el fiscal César Troncoso, de la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional N°5, Seltzer recibió tres puñaladas y fue encontrado muerto sobre la cama matrimonial, lo que refuerza la sospecha de que fue atacado mientras dormía.
Los cuerpos de sus hijos, Ian (15) e Ivo (12), presentaban entre 10 y 12 heridas de arma blanca cada uno. El de mayor edad fue hallado en una de las camas cucheta de la segunda habitación del departamento; el menor, en el living, cerca del hall de entrada, lo que hace suponer que intentó escapar del ataque antes de ser alcanzado.
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Ambos adolescentes presentaban heridas en el pecho y la espalda, además de signos de defensa, lo que indica que lucharon por salvarse. En el dormitorio principal también se halló uno de los cuchillos presuntamente utilizados en los crímenes.
Laura Leguizamón fue encontrada muerta en el baño principal, sobre el bidet. Todo indica que, tras asesinar a su esposo e hijos, volvió a su cama, se autolesionó con un arma blanca y luego se arrastró hasta el baño, donde murió desangrada. La autopsia reveló una profunda herida en el pecho y cortes autoinfligidos en las muñecas. Además, tenía una uña incrustada en el cuello y restos de cabello en las manos, posiblemente por forcejeos.
Los hechos ocurrieron en el sexto piso, departamento A, de un edificio con dos unidades por planta. La vivienda, de unos 100 metros cuadrados, posee balcón a la calle Julián Álvarez y una dependencia de servicio.
La carta y el posible móvil
En la cocina del departamento, los peritos encontraron una carta escrita a mano en una hoja A4 manchada con sangre. Clarín accedió a una imagen del escrito, que aparenta haber sido redactado en distintos momentos. La letra, una mezcla de cursiva e imprenta, es temblorosa y denota un estado de alteración mental.
“Fue mucho. Los amo, lo siento”, dice una de las frases centrales. Otra expresión, escrita en mayúsculas y minúsculas, reza: “Íbamos a la calle”. También se leen fragmentos como “con lo que íbamos a pasar”, “todo mal, muy perverso” y “les arruinaba la vida”, lo que sugiere un estado de angustia y desesperación.
En la parte inferior de la hoja, los investigadores encontraron lo que podría ser el patrón de desbloqueo del celular de Leguizamón, junto a posibles claves de los teléfonos de su esposo e hijos.
Una hermana de la mujer declaró que sufría problemas psiquiátricos, mientras que la empleada doméstica que encontró los cuerpos relató que en las últimas semanas la había notado “distinta” y que sospechaba que había abandonado la medicación.
La causa sigue en investigación y las autoridades intentan reconstruir con precisión el desarrollo de los hechos y el estado mental de Leguizamón antes de la tragedia.
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Con Información de Clarin.-
