Aunque algunas preguntas pueden parecer desfasadas, siguen siendo relevantes en el ámbito de la satisfacción sexual. ¿Mejora la masturbación los orgasmos? ¿Es el orgasmo clitoriano más intenso que el vaginal? ¿Pueden todas las mujeres experimentar más de un orgasmo en una sola relación sexual? Estas interrogantes ayudan a desmitificar ideas erróneas sobre el orgasmo femenino, revelando conceptos erróneos arraigados.
Primero, es importante entender que el orgasmo es una respuesta sensorial generada en el cerebro, generalmente asociada a la estimulación de diferentes zonas del cuerpo. Esta respuesta suele ir acompañada de un aumento en la frecuencia cardíaca, aceleración de la respiración y contracciones involuntarias de los músculos pélvicos. El orgasmo se produce al alcanzar un pico de placer, marcado por contracciones de los músculos de la vagina, el pene, el ano o el suelo pélvico, que ocurren a un ritmo de una por segundo, entre cinco y ocho veces, generando una intensa sensación de liberación en todo el cuerpo. Así lo explica Alba Povedano, psicóloga y sexóloga española. Históricamente, el orgasmo femenino ha estado rodeado de mitos y desinformación, mientras que el placer femenino ha sido relegado a un segundo plano en el discurso sexual.
Mitos y creencias
Existen diferentes tipos de orgasmo
Aunque se habla de orgasmos vaginales y clitorianos, Povedano aclara que el orgasmo es una experiencia única producida en el cerebro, independientemente de la vía de estimulación. Algunas mujeres pueden alcanzar el orgasmo a través de la estimulación vaginal, otras a través del clítoris, y algunas incluso mediante caricias en los senos, estimulación anal o fantasías. Esto evidencia que hay múltiples estímulos que pueden conducir al orgasmo, pero la experiencia en sí es singular y no varía según la zona de estimulación.
No tener un orgasmo significa no disfrutar de la relación
El placer en una relación sexual no está necesariamente vinculado al orgasmo. Creer lo contrario puede estar relacionado con la idea de que el hombre debe ser capaz de llevar a su pareja al clímax. La satisfacción sexual puede encontrarse en la conexión emocional, las caricias y la intimidad compartida. Muchas mujeres experimentan placer y disfrute sin llegar al orgasmo, y es crucial reconocer y valorar estas experiencias como parte integral de la vida sexual; el cuerpo no siempre está predispuesto al orgasmo, y es fundamental aprender a escuchar sus señales.
Los orgasmos son mejores en pareja
Aunque los orgasmos compartidos pueden ser intensos, los individuales también pueden ser profundamente placenteros. La calidad del orgasmo no depende de la presencia de una pareja; se relaciona más con la conexión personal y la autoconciencia. La masturbación es una forma válida y enriquecedora de explorar los propios orgasmos, permitiendo un mayor autoconocimiento y autonomía sexual. A veces, los orgasmos en pareja pueden verse afectados por factores como la distracción o la novedad de la relación, lo que puede influir en su intensidad.

Las mujeres tardan más en llegar al orgasmo
Si bien hay factores que pueden influir en el tiempo que toma alcanzar el orgasmo, muchas mujeres pueden lograrlo rápidamente durante la masturbación, similar a los hombres. En relaciones sexuales compartidas, el tiempo puede variar debido a factores emocionales y de comunicación, pero no hay una regla fija sobre la duración.
Todas las mujeres pueden experimentar múltiples orgasmos
Si bien algunas mujeres pueden experimentar múltiples orgasmos en una sola relación sexual, la capacidad de hacerlo varía entre individuos y no es un indicador de satisfacción sexual. Algunas pueden lograrlo, mientras que otras pueden no experimentar ninguno, y ambas situaciones son válidas y satisfactorias. Es posible trabajar en esta capacidad si se desea, pero no es un estándar.
El orgasmo femenino está vinculado a la eyaculación
Aunque algunas mujeres pueden eyacular, el orgasmo es un proceso independiente. Se suele pensar que un orgasmo potente resulta en una eyaculación, pero no es necesariamente cierto. Ambas respuestas son separadas y pueden ocurrir por separado, aunque también pueden coexistir.
La masturbación puede mejorar los orgasmos
Esta creencia tiene fundamento. La masturbación es una herramienta poderosa para el autoconocimiento sexual, ya que permite identificar los tipos de estimulación, movimientos y ritmos que resultan más placenteros. Este conocimiento personal es esencial para comunicar necesidades y deseos a la pareja, enriqueciendo la experiencia sexual tanto compartida como individual.