Los usuarios adolescentes de WhatsApp han desarrollado una forma particular de comunicarse mediante combinaciones de números, símbolos y abreviaciones. Este nuevo código, que busca transmitir mensajes emocionales de forma breve y discreta, ha ganado popularidad gracias a su difusión en redes sociales como TikTok.
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Uno de los códigos más utilizados es el número 7375, que según una publicación de Infobae, significa “gracias por hacerme feliz”. Este sistema funciona como un lenguaje cifrado:
- El 7 representa “gracias”
- El 3, la preposición “por”
- El segundo 7 alude a “hacerme”
- El 5, a “feliz”
Este tipo de códigos fue ideado por adolescentes y parejas jóvenes, especialmente menores de 20 años, como una alternativa a los emojis, GIFs o stickers, permitiéndoles expresar sentimientos de manera íntima y sencilla.
“La simplicidad del número y su capacidad para transmitir un mensaje emotivo lo han vuelto popular en múltiples contextos”, señala Infobae.
La viralización de estos códigos en TikTok ha impulsado su uso en otras plataformas de mensajería. Varios creadores de contenido incluso han publicado videos explicando su significado y cómo utilizarlos correctamente.
Otros códigos secretos usados por adolescentes
El uso de combinaciones numéricas para expresar emociones no es nuevo. Desde hace décadas, los usuarios de plataformas digitales han ideado formas reducidas de comunicación. Hoy, la tendencia gira en torno al uso de números como sustitutos de palabras o frases.
Uno de los códigos más conocidos es 143, utilizado en países angloparlantes para decir “I love you” (te quiero), ya que:
- “I” tiene 1 letra
- “Love” tiene 4
- “You” tiene 3
Otro ejemplo es 1543, interpretado como “siempre te voy a querer”, donde:
- El 1 representa “siempre”
- El 5, “te”
- El 4, “voy”
- El 3, “querer”
Un lenguaje sin reglas fijas
Aunque estos códigos se han vuelto virales entre adolescentes de todo el mundo, no existe un estándar universal para interpretarlos. Su significado depende del contexto y del idioma del usuario, lo que puede limitar su comprensión fuera de ciertos círculos. Para que funcionen, ambas personas deben compartir el mismo idioma y conocer previamente el significado asignado a cada número.