Novak Djokovic, ganó en la madrugada de este lunes su batalla legal para permanecer en Australia y disputar el primer Grand Slam de la temporada. Al cabo de una audiencia de alrededor de siete horas, la Justicia de ese país le ordenó al Gobierno la liberación del número uno del tenis mundial, quien se encontraba detenido desde el jueves pasado en un centro de detención de la ciudad de Melbourne, tras la revocación de su visado por no estar vacunado contra el covid-19.
Pese a esta resolución favorable para Nole, existe aún una chance de que sea deportado. Es que el gobierno australiano, a través de su ministro de Inmigración, Alex Hawke, tiene la facultad de cancelar el visado de Djokovic y, en consecuencia, forzar la salida del serbio del país.
Así lo advirtió Christopher Tran, un abogado gubernamental, tras el fallo. «Fui informado que (el ministro) considerará si ejerce un poder personal de cancelación», avisó.
En ese sentido, varios medios serbios publican que Djokovic será deportado de Australia pese a la decisión judicial, citando como fuente al padre y al hermano del jugador. «La última información es que quieren detenerlo» dijo Djordje Djokovic, hermano del número uno de tenis mundial, a la emisora TV Prva.
Clarín.-