En la localidad bonaerense de Sarandí, en el partido de Avellaneda, un hombre de 29 años de edad masacró a golpes a un amigo porque lo descubrió mientras tenía relaciones sexuales con su concubina. El asesinato se registró el miércoles en una fábrica abandonada, en cuyo interior vivía la pareja. Los efectivos policiales detuvieron al asesino y también a la mujer, ya que se cree que habría sido cómplice en el violento crimen.
La disputa finalizó en tragedia cuando uno de los hombres, presuntamente con la utilización de una barra metal, golpeó sin piedad al otro sujeto, provocándole la muerte casi de manera instantánea.
Voceros del departamento judicial de Avellaneda – Lanús revelaron que la infortunada víctima se llamaría César (hasta el momento se desconocen los datos filiatorios del occiso).
De acuerdo a lo manifestado por los informantes, el macabro hecho se descubrió cuando los integrantes del Comando Patrulla (C.P.) de Avellaneda recibieron una denuncia al número telefónico de emergencias 911 que hacía referencia a una persona fallecida dentro de una fábrica abandonada, situada en el cruce de General Hornos y Emilio Zola, en el citado distrito, en las proximidades de la cancha de Arsenal, en un predio aledaño a las vías del Ferrocarril General Roca.
Trascendió que, al arribar al mencionado lugar, los uniformados encontraron el cuerpo sin vida del sujeto, a la vez que observaron al hombre, llamado Lázaro, de 29 años, y a su mujer, de nombre Carla, de 26, quienes tenían las prendas de vestir manchadas con sangre. Por este motivo, los policías los apresaron.
Crónica.-