Debido al reciente incremento de la harina y el resto de los insumos. «El pan subirá un 10%», lo que llevará «el kilo a 160 pesos, en algunos casos», advirtieron desde Cámaras y Centros de Panaderos, que temen por dificultades en la producción, la merma del consumo y la pérdida de puestos de trabajo.
La suba en materias primas arrancó el viernes con «entre 10 y 20%» en la harina, lo que dejó el precio de la bolsa «entre 650 y 660 pesos», detalló Darío Santillán, presidente de la Cámara de Panaderos de Ezeiza. Además aumentaron las grasas y margarinas, la cual«pasó de costar la caja por 20 kilos, unos 1.450 o 1.500 pesos, y hoy supera el valor de 2.000 pesos», indicó por su parte el titular de Panderos de Avellaneda, Gastón Mora.
A esto el referente sumó el aumento de la nafta, que «se usa en la logística para el reparto y distribuir en las sucursales; y hasta en las tasas municipales, en muchos casos».
«El precio del pan calculamos que subirá un 10%, por lo que los que lo tenían a 100 pesos, subirá a 110; y en algunos casos, llegará a 160 pesos el kilo», advirtió Mora. En todo el país, el aumento variará entre el 5% y 15%, según lo definan las cámaras de panaderos de cada provincia, según informó la Federación Argentina de la Industria del Pan y Afines (Faipa) en un comunicado.
Frente a los incrementos, la principal preocupación del sector es la posibilidad de un párate en la producción, la baja en el consumo y las pérdida de fuentes de trabajo.
«Venimos complicados por la crisis de la pandemia y la venta ilegal de harina, más ahora con los aumentos. Lo díficil va a seguir manteniendo las fuentes de trabajo y la gente no va a poder comprar el pan. A nosotros que somos panaderías de barrio, que llevamos el pan a la mesa de los argentinos, nos mata«, aseguró Santillán, quien remarcó que los aumentos sólo «fomentan la ilegalidad», ya que en la venta clandestina de harina «los precios varían entre 150 y 100 pesos por bolsa».
Crónica.-